domingo, 24 de febrero de 2013

¿Qué es un ecomuseo?


¡Hola visitantes! Esta semana me gustaría hablaros sobre qué son los ecomuseos, sus características e importancia de esta concepción diferente del museo.

Un ecomuseo es un centro museístico orientado sobre la identidad de un territorio, sustentado en la participación de sus habitantes, creado con el fin del crecimiento del bienestar y del desarrollo de la comunidad.  Desde el ecomuseo se promueve la mejora de la calidad de vida de una localidad y un beneficio secundario que puede surgir de él es la atracción de turismo que valora y respeta el medio y ayuda a un desarrollo de la comunidad mediante el mantenimiento de puestos de trabajo, infraestructuras, movimiento económico, etc.

Los ecomuseos se caracterizan por tener un carácter didáctico donde el visitante aprende aspectos de la naturaleza, cultura e historia del entorno. Son espacios creados por la población de un territorio por lo que la participación y aceptación por parte de los habitantes es fundamental  y su objetivo no es recoger colecciones de objetos sino dar a conocer el patrimonio de una zona mediante la conservación y reconstrucción del patrimonio histórico, cultural y medioambiental de ese territorio.

Ecomuseo Río de Caicena
En España, encontramos diversos ecomuseos como el de Río de Caicena en la localidad de Almedinilla (Córdoba) o Ecomuseo La Huerta de Valoria del Alcor (provincia de Palencia, Castilla y León). Fuera de España, la idea del ecomuseo está más extendida ya que encontramos ecomuseos por todo el mundo, desde el Ecomuseu de Barroso en Portugal hasta Suojia Miao people ecomuseum en China.

En conclusión, los ecomuseos son espacios donde se da a conocer el patrimonio histórico, cultural y natural de un territorio de forma didáctica, llevado a cabo por los habitantes de ese territorio y que no se concibe sin su plena participación. Su objetivo principal es que se produzca un desarrollo de la comunidad a partir de la conservación y reconstrucción del patrimonio que les identifica. Este tipo de museos supone una nueva visión de los museos ya no sólo como espacios donde se exponen colecciones sino como un lugar que va más allá, pretendiendo explicar las raíces identificativas de una comunidad.

sábado, 16 de febrero de 2013

"Museo rima con febrero"



¡Hola visitantes! Esta semana me gustaría hablaros sobre una noticia acerca de los museos ya que es el tema que estamos tratando estas semanas en las clases de Animación Cultural.

El Ministerio de Educación, Cultura y Deporte ha lanzado la campaña “Museo rima con febrero” para fomentar la visita a los museos a través de las redes sociales mediante la descarga de un cupón que servirá para entrar gratis en los 15 museos participantes, entre ellos  el Museo Nacional de Cerámica y de las Artes Suntuarias "González Martí", en Valencia.

La campaña se llevará a cabo a través de Twitter (@enunmuseo) y Facebook (Nuestros Museos). En estas dos redes se recoge información sobre los museos: concursos, visitas guiadas, rutas, información básica, etc. además se puede descargar el cupón para entrar gratis y es un espacio donde el usuario puede exponer todas sus dudas, comentarios y opiniones.

Con esta iniciativa se pretende atraer a nuevos públicos que entiendan los museos como espacio para compartir, divertirse y aprender, recordando además que son gratuitos para menores de 18 y mayores de 65 años o desempleados.

En mi opinión, este proyecto me parece muy acertado ya que hace accesible el arte de los museos a todo el mundo. Además, esta iniciativa puede ayudar a un cambio en la idea que se tiene de los museos como lugares aburridos, serios y dirigidos a la clase alta de la sociedad, haciendo ver que son espacios donde se puede aprender a la vez que pasar un rato divertido y diferente a las actividades cotidianas. Por otro lado, llevarlo a cabo a través de las nuevas tecnologías, en este caso mediante las redes sociales, es un indicador de que los museos están evolucionando buscan do alternativas para darse a conocer y acercarse a todo el público.


martes, 12 de febrero de 2013

¿Cómo planificar una ruta?



¡Hola visitantes! Esta semana me gustaría hablaros sobre cómo planificar una ruta cultural ya que, durante estas últimas semanas hemos estado preparando una ruta sobre el Barroco en las clases de Animación Cultural.

Una ruta cultural tiene como objetivo dar a conocer diferentes aspectos culturales de una zona concreta. Esta transmisión de conocimiento se puede realizar de varias maneras: por un lado se puede organizar una ruta en la que se enseñan monumentos y se explican sus características donde el usuario sólo es oyente. Por otro lado, se puede hacer una ruta más didáctica y participativa, en la que se alterne contenido a transmitir sobre los monumentos con actividades donde el usuario forma parte activa de la ruta, motivándole en el aprendizaje de nuevos conocimientos. Este segundo tipo de ruta es el más completo, enriquecedor y motivador para el usuario.

Para planificar una ruta es necesario un trabajo bien elaborado y organizado para su correcta puesta en marcha. Desde  el comienzo, es necesario establecer las responsabilidades de cada uno. Habrá que dividir el grupo en subgrupos que se dedicarán a una tarea distinta dentro de la ruta a planificar.  Es muy importante la comunicación y relación entre todos los subgrupos para no confundirse en el trabajo, hacer tareas innecesarias y poder elaborar una ruta bien estructurada.

El primer grupo, debe recopilar información sobre la época en la que se va a centrar la ruta. Por ejemplo, si es una ruta sobre el Barroco en Valencia, tendrá que buscar información sobre la época barroca: momento histórico, características de la sociedad, sistema político, características arquitectónicas, etc., es decir, conocer en profundidad el tema para saber transmitir con fidelidad el sentimiento de la época.


Otro de los grupos, y una vez elegida la época en la que se centrará la ruta, se encargará de  elegir los monumentos a visitar. Para ello habrá que documentarse sobre cada uno de ellos y organizarlos para que la ruta tenga un sentido lógico.

El último grupo tendrá la tarea de elaborar diferentes actividades en cada uno de los monumentos a visitar. Estas actividades deben ser  fáciles, concretas, educativas y han de realizarse con el objetivo de que, a través de ellas, se trabajen aspectos de la época en la que nos encontramos.

El objetivo de una ruta cultural no debe ser dar a conocer el mayor número de datos históricos al usuario sino transmitir el sentimiento de la época y los datos más significativos de ésta, ya que el usuario no va a recordar todas las fechas, características, personajes, etc. sino que acabará la ruta con una idea general de lo que se ha querido transmitir.